Oleo - 130 x 97 cm.
Cuando te abrí y me descubriste tus entrañas, el corazón me daba golpes de impaciencia, quería ver lo que escondías, descubrir vidas olvidadas, quería hacer surgir genios de la fantasía, quería que al sacar todos tus secretos, volara mi imaginación, entre las puntillas de una enagua, quería cazar a lazo con las cintas de seda todas las historias que encerrabas... tantas cosas vi, tantas sentí, tan cerca estuve de los dueños de todos esos objetos, que notaba en mi pulso descontrolado por la emoción su pulso sereno de vida cumplida.
Pertenece a una colección privada